Una tartesana dulce es una excusa para celebrar: un no-cumpleaños.
Una no-graduación. Un no-ascenso. Una no-boda.
Es la felicidad de olvidarse de buscar razones para saborear lo mejor de la vida.
Las recetas más sabrosas del mundo, reinterpretadas desde la tradición repostera belga y los ingredientes de mercado más frescos.
Perfectas como postre, para acompañar un té, un café… o a ti mismo.